Experiencias de estudiantes de Administración de Negocios Internacionales de la UDLAP (Parte 6 de 6)
Mis experiencias en México y en la UDLAP – Amadeus Van Lier
”México, ¡un país lleno de contrastes! “ Esta era una de mis primeras observaciones al llegar, desde hace más de un año, a esta tierra. Una constatación que en el trascurso del tiempo tiende a confirmar y estabilizarse. Así México es selva y desierto, es playa y altiplano, es acogedor y violento, es Monterrey y San Juan Chamula, es Carlos Slim y el comerciante ambulante, es primer y tercer mundo a la vez. Los contrastes son una de las varias razones que convierten a mi estancia en una experiencia valiosa, apasionante y seguramente inolvidable.
Otra razón por la cual México tiene gran potencial de ser un éxito personal para mí, es la universidad. La Universidad de las Américas Puebla ofrece a sus estudiantes no sólo un número impresionante de carreras y cursos interdisciplinarios, sino también una cantidad de actividades donde cada estudiante encontrará varias ocupaciones a su gusto. En los talleres, los estudiantes de repente descubren talentos aún desconocidos y empiezan a fascinarse para su nuevo ocio. En mi caso ha sido el voleibol, el fútbol rápido y el baile, para sólo mencionar algunos. Me da gusto de ver que la universidad obviamente considera los deportes y las actividades extra-curriculares como aporte esencial para el desarrollo personal.
Con respecto al ámbito educativo, la UDLAP cuenta, igual que mi universidad de origen, la European School of Business Reutlingen, con clases de tamaño muy reducidas. En el salón jamás se encuentran más de 25 estudiantes lo que da a cada quien la oportunidad de presentar sus dudas frente al profe y de sacar el máximo de la clase, privilegio que en Alemania hasta hoy tienen sólo algunas universidades destacadas. Al contrario de mi país natal, las exigencias universitarias son, sólo en muy pocas ocasiones desbordantes así que casi siempre permiten seguir a sus propios proyectos, viajes et cétera.
Llegando a la UDLAP, me agradó poder constatar que había una cantidad respetable de extranjeros, provenientes de muchos diferentes países. Esta mezcla de naciones enriqueció muchas de mis clases, entre otros, Administración Intercultural o Marketing Internacional, clases que mediante de esta multi-culturalidad logran de salir de un marco teórico y que se convierten en algo tangible y comprensible. Además, los profesores fomentan deliberadamente el trabajo en grupos internacionales lo que tiene como consecuencia de llegar a conocer mucha gente y de ganar experiencia y competencia intercultural, una capacidad que en tiempos de globalización considero muy importante.
Al contrario del campus de mi universidad de origen que básicamente consiste en 50m² de puro pasto, este campus parece más a un parque botánico. Es un lugar donde me gusta pasar mi tiempo libre y es un lugar donde me doy cuenta de la inmensa suerte que nosotros tenemos de vivir en estas circunstancias y de estudiar en esta universidad. Si no acá en este núcleo privilegiado, ¿dónde estará el sitio ideal para generar las ideas acerca de nuestro propio negocio o acerca de un proyecto para reducir los contrastes sociales? La mejor experiencia que tuve hasta ahora es aquella de saber que la UDLAP me apoya en mis planes, sean de naturaleza lucrativa o social. Esta oportunidad hay que aprovechar, no más tarde sino ahora, siendo estudiante.