Este 17 de abril continuamos con el ciclo de nuestros Viernes de Cinexpectativas titulado Otros horizontes: cine antihistórico: un recorrido a través de episodios o personajes poco abordados en la historia y/o en la cinematografía o analizados en estas cintas bajo una mirada distinta. La segunda cinta de este ciclo será Cabeza de Vaca.
A propósito de esta película te compartimos la reseña que escribió Kevin Flores, estudiante de Psicología y prestador de Servicio Social de Capilla del Arte. Y recuerda, todas las funciones de Viernes de Cinexpectativas son a las 6:30p.m., con entrada libre. Capilla del Arte es un espacio cultural de la UDLAP que se ubica en la 2 Norte 6, en el Centro de Puebla. Todas nuestras actividades son válidas por puntos PPA.
Basada en los escritos del conquistador Alvar Núñez Cabeza de Vaca, esta película aborda la historia de un español que se embarcó en la expedición de Pánfilo de Narváez a la Florida. Cuando la expedición naufraga en las costas de Texas, tras ser diezmados por las flechas indígenas, Cabeza de Vaca cae prisionero y es convertido en esclavo junto con algunos sobrevivientes de la expedición. Durante varios años Alvar Núñez será el servidor de un chamán trashumante y aprenderá sus técnicas curativas.
Es a partir de esta historia que incorporaremos a nuestros antecedentes el poder de una cultura misteriosa que pone en duda lo aprehensible de esta realidad. Cabeza de Vaca se vuelve el ejemplo de cómo nuestra ignorancia genera en nosotros un ego desesperado y nos hace tomar decisiones en las que no creeríamos; es adentrándose en la humildad y el poder de la deriva por tierras desconocidas, que este español logra ver más allá de su antigua misión, más allá del oro y la conquista pues somete a cuerpo y mente a una práctica oscura que cambia su posesión de la realidad.
Este filme ocupa el lugar 61 dentro de la lista de las 100 mejores películas del cine mexicano, según la opinión de 25 críticos y especialistas del cine en México, publicada por la revista Somos en julio de 1994. Fue seleccionada por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas para representar a México en los Premios Óscar. La película ganó la Makila de oro en el Festival de Cine de Biarritz (Francia), en 1991.
