Experiencias de una tesis: las plantas del biocombustible
La investigación se basa en el simple deseo de conocer lo que rodea al ser humano y no es propia sólo de las personas que se dedican a la ciencia; sino de cada individuo que busque develar lo que antes desconocía; si prestan atención, es una gran descripción para un niño de corta edad que observa y aprende de su entorno. De esa misma forma, yo como científico tengo ese anhelo de saber y, por ello, una de mis pasiones es la investigación. Una de mis experiencias en investigación es mi tesis, cuyo tema se desarrolla alrededor del marco de las energías alternativas; en específico de la obtención de biodiésel a partir de los aceites que contienen las semillas de algunas plantas.
La tesis puede no ser atractiva por la cantidad de páginas que hay que escribir de ella, pero hacerla es completamente diferente. Adentrarse en la tesis es emocionante, se te adjudican responsabilidades que antes no tenías, lo que te permite ciertas libertades. Dentro de la tesis tienes un objetivo; respaldar tu hipótesis, pero mientras te dirijas a esa meta eres libre de organizarte para realizar esto o aquello, para observar o actuar, para pensar, crear o destruir; estar en la tesis es tener un poco de control y de poder sobre lo que haces e investigas. Cuando estoy en la tesis las actividades llegan unas tras otras; mientras coloco una extracción con hexano en un sistema denominado soxhlet que durará seis horas; observo como una solución de etanol-éter 2:1 (v/v) que contiene el aceite de la semilla cambia de coloración del blanco al rosa gracias a la base contenida en la bureta goteando y a la ayuda del indicador fenolftaleína, por otro lado un matraz de bola se calienta en un baño maría para alcanzar la temperatura adecuada para medir su índice de refracción.
Uno de los atributos importantes de la tesis es el aprendizaje que obtienes en el uso de técnicas, materiales e instrumental del laboratorio, debido a la práctica continua. Sin embargo, es mucho más trascendental el conocimiento que adquieres en cuanto a la resolución de problemas, porque no todo resulta como uno espera; es cuando tus conocimientos y habilidades son probados, y al encontrar la solución el sentimiento de ánimo y de confianza son insuperables.
Cada persona debe buscar lo que más le gusta en la vida para dedicarse a ello y que su talento se desarrolle sin esfuerzo. En mi caso, la investigación es mi talento y es, en parte, a lo que deseo dedicarme. Al final, sin importar qué sea lo que hagas, no pierdas la capacidad de asombro y de investigar lo que un obtuso jamás descubrirá.
Por: Augusto Herrera Coca, estudiante de la Licenciatura en Ciencias Farmacéuticas, UDLAP.