Operar debe asegurar calidad de vida y no sobrevida
“Todo el personal que trabaja con pacientes causamos daño, la enfermera al puncionar una vena, el médico al prescribir un medicamento que tiene efectos secundarios, el cirujano para llegar a un apéndice tiene que cortar la piel. Pero cuando trabajamos con el cerebro, la médula o los nervios (estructuras que fácilmente pueden tener una repercusión) hay que causar el menor daño posible con el máximo efecto terapéutico”, señaló el Dr. Héctor Velázquez del Hospital Civil “Dr. Juan I. Menchaca” de Guadalajara, Jalisco en el Segundo Coloquio de Ciencias Sociales de la UDLAP.
La Universidad de las Américas Puebla fue el lugar idóneo para que la Dr. Angélica Flores, el Dr. Héctor Velázquez y el Mtro. José Ángel Ontiveros presentarán su trabajo “Evaluación de la comprensión del lenguaje trans-quirúrgico, pre-quirúrgico y post-quirúrgico”, el cual plantea técnicas preventivas o de tratamiento de cirugías cerebrales para posibles daños en la comprensión del lenguaje.
La cirugía por lesión cerebral se realiza con el paciente dormido-despierto-dormido, es decir se anestesia al paciente para hacer los cortes craneales, ya con el órgano expuesto se despierta al paciente para realizar un mapeo de las estructuras elocuentes mediante electrodos y estimulación quirúrgica transcraneal que brinda una resolución espacial para delimitar las áreas sensoriales, motoras, elocuentes, cognitivas, de lenguaje y memoria que pudieran estar dañadas por medio de reacciones del paciente, para después volverlo a dormir para suturar las heridas.
Tras la operación la Dr. Angélica Flores, profesora de tiempo completo del Departamento de Psicología de la Universidad de las Américas Puebla, expresó que los pacientes son sometidos a terapias para revisar cada movimiento, reacción, acto del habla, del escucha, para cerciorarse que algo no haya resultado mal. En el caso de su trabajo, la también experta en electrofisiología explicó que se realizan exámenes como el Test de Barcelona o el N400, que utilizan oraciones para que los pacientes las conviertan en preguntas y luego a la forma negativa.
El Dr. Héctor Velázquez, jefe de neurocirugía de mínima invasión en el Hospital Civil “Dr. Juan I. Menchaca”, reveló que es importante que durante estas operaciones este presente un neurocirujano y un neuropsicólogo, que coadyuven en caso de alguna reacción desfavorable y aseguren que la recuperación del operado será satisfactoria, puesto que para él “la importancia de reintegrar al paciente a su vida antes de la operación debe ser con gran calidad de vida y no en términos de sobrevida”.