Mitos sobre la tecnología que no debes creer
Como en todo, siempre hay un lado oscuro para todas las cosas, y aunque nos sea muy útil y no podemos dejar de usarla, la tecnología no es la excepción. Sin embargo, a veces, este lado menos amable de las cosas se exagera y llega a temerse si no tenemos un buen criterio para descartar la información falsa sobre el tema.
Por ello que este Jueves de tecnología queremos hablarte sobre algunos mitos de la tecnología que no deberías creer, para que puedas utilizar tus gadgets adecuadamente y sin temores 😉
No debes cargar tus aparatos toda la noche. Esto solía ser verdadero, así que, para ser justos, es comprensible que mucha gente aún lo crea; sin embargo, con la rapidez en que evoluciona la tecnología, las baterías de nuestros gadgets ya no se hacen como antes. Y qué bueno, ahora, las baterías se hacen con litio, un material que evita que la batería siga cargándose una vez que se ha completado la carga. Sin importar que siga conectada.
A menos que decidas dormir con tu teléfono bajo la almohada o destruir la batería con un cuchillo, no corres el riesgo de que tu teléfono se sobrecaliente o se destruya. Incluso que provoque explosiones o cortos circuitos cuando lo utilices mientras se carga.
Sólo no lo hagas seguido, recuerda que gastas energía eléctrica.
No debemos usar cargadores de otras marcas. Cuenta la leyenda que, si utilizas un cargador para la batería de tus gadgets elaborado por otra empresa que no sea la que manufacturó tu dispositivo, este se desgastará o explotará y entonces dejará de existir. Esto no es cierto, sin embargo, el mito se deriva del hecho de que, si utilizas un cargador de un fabricante desconocido o poco confiable, la calidad de éste sí puede afectar a tu dispositivo.
Así que no te preocupes, puedes utilizar un cargador distinto para tu Smartphone. Sólo asegúrate de que la marca del cargador sea confiable y que el voltaje/amperaje de entrada y salida de tu teléfono sea compatible con el cargador (esto viene en tu instructivo).
Debes esperar a que tus gadgets se queden sin un mínimo de batería. A pesar de que este mito ya no cobra tanta fuerza, algunas personas aún piensan que necesitan esperar a que la batería de sus gadgets se descargue por completo para poder recargarla sin consecuencias graves, como el desgaste de la batería o del equipo.
Para las baterías de níquel y cadmio esto es verdad; pero esas casi se han extinguido. Las baterías de hoy en día, como te comentamos arriba, están hechas de litio, y de hecho, a estas baterías les va mejor mantenerse entre el 20% y 80% de carga. Cualquier otra cifra podría acortar su tiempo de vida útil.
Lo que es más, las baterías de litio pueden dañarse o volverse peligrosas (cuando la batería es de baja calidad) si se descargan por completo constantemente. Consulta el manual de tu dispositivo para revisar cualquier instrucción específica para cuidar la batería.
Apaga tu computadora. Siempre. Sin importar que sea de escritorio o portátil, esta creencia aún persiste. Pero tenemos buenas noticias, igual que en los casos anteriores, no es necesario apagar tu computadora todos los días, pues a diferencia de los dispositivos de antaño, las partes que componen a las computadoras de hoy son más resistentes y no se dañan fácilmente.
Sin embargo, no mantengas tu computadora en modo de suspensión o hibernación siempre, apágala un par de veces a la quincena o reiníciala cada que tu sistema operativo te lo indique para poder asegurar que las actualizaciones de software requeridas se estén realizando.
Así que, si se te olvida apagarla o necesitas realizar una actualización o respaldo durante la noche, puedes hacerlo sin preocuparte. Sólo recuerda apagarla con regularidad para ahorrar energía.
Desfragmentar tu disco duro. Otra creencia que se heredó de tiempos pasados, por ahí de principios de los 90. Cuando apenas nacías era necesario desfragmentar el disco duro de las computadoras con regularidad para asegurar su óptimo funcionamiento. Hoy en día, Windows y otros sistemas incluyen una función por default que se encarga de desfragmentarlo automáticamente, sin que tengas que indicarlo o sin que interfiera con tus actividades. Hacerlo manualmente podría incluso causar problemas a tu equipo.
Si borras un archivo de tu computadora, se va para siempre. No precisamente. Cuando borramos algún archivo o foto comprometedora y pensamos que ya no queda rastro alguno de su existencia, probablemente nos equivocamos; a menos que seas del servicio secreto y rastrees los metadatos y a toda la gente que pueda poseer una copia del archivo, claro.
Cuando un archivo es creado y después borrado, la información se queda “oculta”, esperando que otro archivo llegue para sobrescribirse en el lugar de la información anteriormente borrada. Antes de que esto suceda, el archivo aún puede recuperarse con técnicas especiales.
Algo parecido ocurre con tus gadgets; cuando seleccionas eliminar cierta información no se borra en su totalidad, y puede haber gente que busque lo que queda de esa información para “llenar” los huecos.
Por ello te recomendamos pensarlo bien a la hora de crear un archivo comprometedor o a la hora de deshacerte de tus gadgets. Si no estás seguro de querer hacerlo o contiene información muy importante que no te gustaría que cayera en manos ajenas, puedes reciclarlos, aquí te damos algunas ideas.
El modo de incógnito para navegar en Internet es privado. No precisamente, lo que esto quiere decir es que las páginas que visites, autocompletado de búsquedas y contraseñas no quedarán registradas en tu navegador; sin embargo, si alguien quisiera descubrir tu identidad y se diera a la tarea de hacerlo, el modo incógnito no lo va a evitar, pues tu proveedor de internet o administrador de red podría grabar esta información.
Privado sólo significa que es más difícil de encontrar para el ciudadano promedio.
¿Qué te parecieron estos mitos? Si conoces otros o tienes algunas experiencias con los que hemos mencionado, no dudes en compartirlos con nosotros.
Nos leemos el próximo jueves.