La mejor forma de evaluar un proyecto es reconocer los beneficios que atrajo y dejará, explica egresada UDLAP
No puede verse como fracaso o mal manejo de recursos al desfase de tiempo en la construcción de un edificio porque ningún proyecto sale como se pensaba; el no hablar inglés después de tres años tampoco es un fiasco, seguramente hubo inconvenientes en el proceso, se descubrieron nuevas cosas o se dieron otros beneficios, aseguró Diana Carolina Garduño Landazuri, consultora estratégica para Oficinas de Dirección de Proyectos y egresada de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
También, comentó que es muy común ver que cuando una persona se traza el camino de un proyecto piensa si deberá ser enlínea recta porque es una imposición de pensamiento social, pero cuando los resultados no se dan de esa forma se habla de fallos, pues no se comprende que “hay ciertas circunstancias retrasando, haciendo ciertos cambios y posiblemente no termine tal como se destinó, pero eso no quiere decir que hubo un error o es un fracaso, simplemente se tuvo un resultado diferente”, explicó.
Por ejemplo, dijo, “alguien podría tener la idea de estudiar una licenciatura, pero en el proceso se encuentra con oportunidades de explorar y diversificarse, eso da herramientas para lograr un pensamiento interdisciplinario y saber lo que realmente te gusta en la vida. Entonces se debe ser paciente, tener adaptabilidad, tener la visión de que habrá adversidades en todas las ocasiones, fijarse bien qué se quiere ser, y si por algún momento se pierde la visión, entonces volver a las bases del proyecto, revisar cuál era su objetivo principal y pensar que las nuevas actividades están dentro del triángulo de gestión de proyecto (tiempo, calidad y presupuesto)”, aconsejó la también Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la UDLAP.
Durante la entrevista, algo que enfatizó Diana Carolina Garduño es que la mejor forma de evaluar un proyecto es reconocer los beneficios que atrajo y dejará más allá de los económicos, de los alineados al proyecto o en los tiempos; “por ejemplo, el proyecto de la Casa de la Ópera de Sidney se tardó más de lo que estaba establecido, sin embargo, fue un éxito porque ha dado otros beneficios de lo que estaba planeado y a largo plazo se va a terminar recuperando la inversión”, expresó.
Finalmente, la egresada de la UDLAP destacó la educación recibida en la Universidad de las Américas Puebla, ya que dijo brinda, través de las materias de tronco común, un panorama diferente que lleva a desenvolverte como financiero, pero que si te gusta el arte entonces dedicarte a hacer valuación de arte contemporáneo”.